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Mucho público y una excelente temperatura para la jornada inaugural de nuestra Semana Santa. Los naranjos de la Plaza Nueva, presagiando ya la primavera en sus primeros brotes de azahar, fueron testigos junto a cientos de lucentinos y lucentinas de la salida procesional, a las seis de la tarde, de la primera de las cofradías del Domingo de Ramos.
La Pollinita abría las puertas de San Mateo y con ello, de forma simbólica, las de nuestra Semana de Pasión. La hermosa imagen de Jesús a lomos de la "borriquilla" rodeado de palmas, ponía la nota de color y el primer torralbo de nuestra Semana de Pasión.
Como es habitual, el señor estuvo acompañado en su recorrido por la Jerusalem lucentina por muchos niños, ataviados a la usanza hebrea, y numerosos devotos portando las palmas blancas bendecidas por la mañana.
Sergio Gómez, con Pepe Ranchal en la esquina izquierda, Antonio Arjona en la esquina de la Salud y Rafael Calvo en la esquina mala, y el sabio consejo de Paco Escudero como "manijero porrilas" junto al resto de su cuadrilla de santeros, fueron los encargados de pasear a la pollinita de San Mateo por las calles de Lucena, sobre el tradicional trono de madera tallada, en color caoba de estilo neobarroco, con esa característica candelería de tulipas de opalina blanca que lo hacen único.
Abrió el paso de la Pollinita la Agrupación Musical del Stmo. Cristo de la Humillación y Servitas, de la cofradía homónima lucentina, a la que tendremos oportunidad de ver varios días más en nuestra Semana Santa.
Les dejamos algunas fotos de este desfile procesional.
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