...¿Por qué me preguntas si soy de África, si me crié en América o si nací en Europa? ... Mi nacionalidad es lo qee menos importa. Yo solo soy un hombre en busca de un camino. Piensa un poco, mi amiga, ya verás...
Esta es la letra de uno de los temas que pudieron escucharse en la tarde de ayer en boca de los alumnos del taller de rap de la Fundación Acuarela de Barrios, en el marco de la Jornada de la Tolerancia, celebrada en la Biblioteca Pública Municipal y organizada por la Delegación de Servicios Sociales.
Una oportunidad para que los chicos y chicas de este taller pudieran mostrar en público el fruto de su dedicación a esta disciplina musical en la que Acuarela de Barrios lleva ya un año trabajando, uniendo a la música conceptos como tolerancia, diversidad o respeto, que en boca de estos jóvenes, en su mayoría extranjeros y procedentes de familias desestructuradas o con importantes carencias económicas, adquieren un valor y sentido especiales. Catalín, Bodi, Florín, Muyi, Vicente, Valentín, Andrea, Mireia, Reme, Celi o Jorge dejaron sobre el escenario retazos de vivencias y temas que les tocan muy de cerca y recogieron el aplauso del numeroso público que participó en estas jornadas.
Durante la tarde de convivencia, se celebró también una yincana, juegos de pistas para pequeños, un recital de poesía, un taller de pintura de camisetas o una degustación de dulces típicos de varias culturas con degustación de tés de varios países.
El proyecto se encuadra dentro del Programa de Inmigrantes y del Desarrollo del Fondo Autonómico de Inmigración. La Administración autonómica aporta 12.000 euros para este programa y Servicios Sociales se responsabiliza del diseño y la ejecución de las actuaciones. El objetivo es la información y el acercamiento entre personas de diversas culturas. Desde la Mesa Local de Inmigración, se pretende aunar esfuerzos para que las intervenciones que se decidan provoquen el efecto deseado: mayor conocimiento, información y acercamiento a la población de origen extranjero que viene a la ciudad, 'ciudadanos de pleno derecho de nuestro pueblo', en palabras de Miriam Ortiz, responsable del programa.
Por su parte, Ana Franco, impulsora de la Fundación Acuarela de Barrio, que trabajan con los niños temas de ámbito social, señala que 'El rap es una oportunidad para ellos, se hacen valer, sube su autoestima y se sienten importantes porque palpan el impacto en el pueblo'. El apoyo escolar, el deporte, los talleres de comprensión sobre la tolerancia y una escuela de rap, son algunas de las ofertas de este colectivo que acaba de cumplir su primer año funcionando. Mayoritariamente, aglutinan a participantes de Rumanía, Bulgaria y Marruecos.
