Pese al acuerdo anunciado este jueves por el equipo de gobierno –incluida la consideración explícita de la concejal de Educación, Encarnación Camacho, en el sentido de que el ayuntamiento no pagaría en ningún caso el más que probable alquiler de una cocina externa para los alumnos del ciclo medio de Cocina y Gastronomía del IES Juan de Aréjula entre tanto duran las obras en el edificio que acoge estas prácticas profesionales–, el Ayuntamiento habilitará una partida económica en el presupuesto municipal para hacer frente, si fuera necesario, al arrendamiento de dichas instalaciones.
Así lo decidió el Pleno de la Corporación municipal, reunido este viernes a petición de los grupos municipales de la oposición y ante la atenta mirada de un grupo de alumnos de este ciclo. Fue el portavoz municipal de Izquierda Unida, Miguel Villa, el encargado de defender la propuesta de crear una partida presupuestaria con cargo al dinero de la mejora de la contratación de la reforma del edificio, un extremo que encontró el rechazo de la interventora municipal por ser una obra de carácter financieramente sostenible que no puede asumir la financiación de un alquiler.
Sin embargo, el Pleno, con los votos favorables de todos los ediles presentes, respaldaba habilitar esa partida con cargo a otro capítulo del presupuesto municipal, a decidir durante el trámite administrativo que ahora se inicia, si bien será necesario que este tema vuelva al Pleno para acordar su dotación económica definitiva.
Antes de alcanzar este acuerdo, desde los grupos de la oposición -intervinieron además de Villa, los portavoces de PP y C's, Francisco Huertas y Purificación Joyera- se justificó la petición de un pleno extraordinario por la necesidad de resolver la situación creada a los alumnos del ciclo formativo como consecuencia del retraso de las obras de reforma de las cornisas del edificio contratadas por el Ayuntamiento, así como por el desconocimiento de la reunión que el jueves se producía entre responsables municipales, el Servicio de Inspección de la Delegación Territorial de Educación y la dirección del IES Juan de Aréjula, en la que se acordó que las clases se podrían desarrollar en las cocinas habituales hasta que la empresa adjudicataria inicie los trabajos. En este punto, la oposición reprochó al equipo de gobierno la falta de información a los grupos municipales tanto sobre la citada reunión como sobre el acuerdo alcanzado, además de mostrar su disconformidad con el mismo, al considerar que no garantiza un desarrollo del curso normal y con las garantías educativas necesarias.
Desde el equipo de gobierno, la concejal de Educación, Encarnación Camacho, sostenía que esa reunión "de carácter técnico" no había sido "secreta", a lo que el alcalde Juan Pérez añadió que "se trata de un tema clarísimo de responsabilidad de la Junta" considerando que la petición de este Pleno extraordinario por parte del resto de grupos obedece "al escaso conocimiento de cómo funcionan los temas educativos".
