El siempre generoso palco del Coso de los Donceles ha repartido esta tarde doce orejas y un rabo en el festival taurino celebrado a beneficio de la Real Archicofradía de María Santísima de Araceli, con novillos de Fernando Peña, bien presentados y flojos en general, aunque dando juego.
La plaza, en la que se estrenaba la empresa Tauroemoción, registró algo más de media entrada y el respetable disfrutó de lo grande.
Destacaron las faenas de Finito de Córdoba al segundo de la tarde, un novillo sin fuerza al que el cordobés supo dosificar con maestría para sacarle lo poco que tenía dentro, y el extremeño Emilio De Justo, que lidió con mucho gusto y profundidad al mejor ejemplar de la tarde cuajando varias series de calidad por los dos pitones.
Por su parte, Fandi, se llevó el mejor premio con una faena marca de la casa, con variedad en el capote y espectáculo en el tercio de banderillas que encandiló al público. Más flojo Cayetano, tomando muchas precauciones con su rival, en una faena de menos a más.
La novel espada cordobesa Rocío Romero se presentaba en Lucena con caballos y gustó en el que cerraba plaza, con el que estuvo voluntariosa y con muchas hechuras.
El primero de la tarde fue un toro para rejones de La Castilleja, parado, al que Leonardo Hernández desorejó tras una actuación plena de madurez, en la que puso todo de su parte, logrando conectar con la grada pese a la falta de juego de su oponente.
