De un tiempo a esta parte se han concentrado muchos esfuerzos para poner en valor de nuevo la formación profesional. Por conseguir el objetivo de democratizar la universidad y que toda aquella persona que quiera pueda acceder, de una manera u otra, se dejó de lado esta otra vertiente, que ofrece siempre contenidos más frescos y dinámicos.
Es posible que ahora llegue entonces la etapa dorada a la formación profesional ya que, además, se han creado muchos títulos nuevos adaptados a las realidades del momento, como técnico superior en enseñanza y animación sociodeportiva, técnico de nutrición y otras carreras profesionales que gozan de mucha aceptación en la actualidad.
Ventajas de estudiar formación profesional
Entre las ventajas de estudiar formación profesional se encuentra la minuciosidad con la que se estudia el módulo y se transfieren los conocimientos de profesorado a alumnado de una manera casi natural, descubriendo juntos, dado el carácter inminentemente práctico de esta elección.
Igualmente, al ser menos personas en el aula, la forma de aprender y la relación que se tiene con lo aprendido es especial, lo que genera también un fuerte espíritu de equipo entre los alumnos, un skill muy demandado en el mundo del trabajo.
A esto se le une también que muchos de estos ciclos formativos incluyen prácticas obligatorias donde, en un laxo de tiempo más gestionable que en la universidad, el alumnado puede poner a prueba todos los conocimientos adquiridos durante su formación, quedándose un alto porcentaje tras las prácticas.
Según un estudio de Adecco realizado en el último semestre de 2019, las demandas de empleo de perfiles de formación profesional habrían crecido considerablemente y ya ocupaban cerca del 39% del total del mercado en ese momento.
Muchas de estas causas se deben a que los ciclos tienen mayor capacidad para poderse adaptar a los perfiles demandados e impulsan trabajadores más flexibles. Por otra parte, existe un cierto exceso en titulados universitarios para puestos que no requieren de este tipo de certificación y que, por tanto, se quedan fuera en muchos procesos o entrando, sin casar los suficiente ni con las condiciones ni con las funciones a realizar.
De una manera u otra, está claro que el interés experimentado por estos ciclos formativos es bastante elevado en este último período.
Centro Al-Ándalus, ejemplo de crecimiento
Tomando como ejemplo el caso de Técnico Superior en Enseñanza y Animación Sociodeportiva, de la escuela de deporte Al-Ándalus, se ha visto cómo el interés ha ido aumentando, sumando muchos alumnos nuevos.
La escuela ofrece este programa completo que tiene muchísimas salidas profesionales y no solo centradas en el mundo deporte, como se podría pensar en un principio.
En este sentido, tras haber realizado el curso de 2000 horas, el alumnado puede enfocar su carrera en perfiles que pueden ir desde monitor de tiempo libre hasta animador turístico, pasando por coordinador de campamentos.
El Centro Al-Ándalus nació en 2011, hace ya diez años, y está integrado por profesionales de las ciencias de la actividad física y el deporte así como perfiles técnicos de carácter multidisciplinar.
El objetivo fundamental con el que se creó el centro era – y sigue siendo – ofrecer una alternativa distinta y atractiva a todas aquellas personas amantes del deporte, de lo social y de la vida real.
En este sentido, la escuela fue abriendo distintas sedes en Andalucía y sumando titulaciones específicas de gran recorrido y reconocimiento en el mundo empresarial y de la enseñanza.
Igualmente, además, dispone de varios de programas de beca o experiencia laboral y personal que, sin duda, se presentan como un plus importante al que prestar atención a la hora de elegir la escuela.
Precisamente, son los ratios de empleabilidad, las oportunidades laborales que ofrecen así como la opinión de antiguos alumnos lo que más se valora a la hora de decidir qué módulo o titulación de formación profesional estudiar y en qué escuela.
Esto, sin embargo, resulta bastante complicado – por no decir imposible – cuando se quiere estudiar un título universitario, al ser un número tan ingente de personas que se entremezclan en años.
Hoy por hoy en el año 2020 -2021 ya el Centro Al-Ándalus cuenta con 500 inscripciones en los diferentes títulos que ofrece, creciendo siempre e incorporando nuevas disciplinas y visiones a la hora de impartir los conocimientos.
Tras este período en el que el coronavirus ha puesto todo patas arriba y arrojado un halo de incertidumbre a todo lo que antes se daba por sentado, se espera que las formaciones más prácticas y con mayor elasticidad sean las más demandadas a corto plazo.
Sin duda alguna, en ellas está el mundo del deporte y de la interacción con el medio, tanto de grandes como de pequeños. La sensación de no poder disfrutar del aire libre de una manera completa, ha hecho que sean cada vez más las personas que busquen practicar deporte o actividades que les permita interaccionar con la naturaleza, algo que, claramente, beneficiará a este tipo de titulaciones.
