Por todos es conocido la afición por los juegos de cartas y de azar en toda Europa, en particular en nuestro país, Francia e Italia. En todas estas regiones existe una amplia tradición en torno a este tipo de entretenimiento.
Entre los más populares se encuentra el blackjack, conocido como veintiuno en España. Cosa que no nos extraña, ya que parece ser que este juego fue creado en nuestro país. Si nos remontamos al siglo XVII podremos encontrar la primera mención a una versión de este pasatiempo social en las Novelas Ejemplares de Miguel de Cervantes, publicadas en 1613. Se habla en particular del blackjack, o como se denomina en este libro la Veintiuna, y de sus normas en la narración breve de Rinconete y Cortadillo.
Su extensión por todo el continente europeo y por América, ha hecho que se convierta en uno de los clásicos tanto en los casinos presenciales como en los online, en los que se ofrece una variedad de blackjack online, al igual que otro juegos como slots y ruleta. Estas plataformas dependen en gran parte de la innovación y las nuevas tecnologías para poder adaptarse a cualquier jugador. No debemos de olvidar que, a pesar de estar asociado con los juegos de azar, lo cierto es que requiere de habilidades fuera de estas como la estrategia para conseguir la mejor puntuación (la más cercana a 21).
Otro de los juegos de los que más se habla y se juega es el de la Brisca. Se trata de una variedad que puede integrarse en la familia de juegos del Tute, ya que en ambas utilizan una baraja española, distribuyéndose las cartas por bazas y contando con un palo de triunfo. Una vez que se juega la misma se distribuye una nueva ronda utilizando el mazo que está en la mesa. El objetivo para ganar es obtener el número mayor de bazas o cartas por persona o por parejas.
Aunque se trata de uno de los juegos de naipes más populares en nuestro país, lo cierto es que parece ser que se inventó en Holanda. De esta región pasó a Francia, y de ahí a la Península Ibérica en el que ha permanecido en el imaginario y ha pasado de generación en generación.
Aunque los dos anteriores son de los más conocidos, no podíamos dejar de hablar del chinchón o de la escoba. A diferencia de otros, en el primero no hay naipes en la mesa, sino que están en la mano de los jugadores. El objetivo del mismo es formar diferentes jugadas: series (mismo número, diferente palo) y escaleras (mismo palo y números consecutivos). En cuanto al segundo, las matemáticas toman valor de nuevo como ya lo hacían en el blackjack, aunque en este caso hay que formar un total de 15 con uno o más naipes de la mesa y las que están en nuestra mano.
Como hemos podido ver este tipo de entretenimiento se ha utilizado en nuestro país desde hace años y hay quien lo sigue perpetuando tanto con sus amigos en una noche de verano como desde la comodidad de su hogar con un dispositivo móvil. Y es que los tiempos avanzan con la tecnología, así como las formas de entretenimiento adaptándose a las nuevas necesidades.
