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El pleno rechazó ayer una moción del PP en la que se solicitaba al nuevo gobierno de la Junta de Andalucía el cumplimiento de toda una serie de proyectos comprometidos con nuestra ciudad en los últimos años y el pago de las cantidades que adeuda al consistorio lucentino y a algunos colectivos sociales locales.
La dureza de la exposición de motivos en la que se sustentaba la petición de los populares, con acusaciones de corrupción al PSOE y críticas al pacto de gobierno entre socialistas e IU, fue determinante para que ambas fuerzas rechazarán aprobar la moción, pese a manifestar sus portavoces estar de acuerdo con las medidas solicitadas. En ese planteamiento inicial, el PP indicaba que "IU, con total desprecio de la mayoritaria decisión de los andaluces no ha dudado en sumarse ... al carro del PSOE para constituirse en la muleta de un partido gastado y agotado tras 30 años de ejercicio monopolístico del poder, profundamente dividido y sobre todo corrupto en sus estructuras, gestos y ejercicio, pasando censurar su gestión a ser sumiso partícipe de la misma, a cambio del plato de lentejas de tres sillones". Además se indica que "se ha constituido un gobierno de coalición entre los partidos perdedores, PSOE e IU, cuya legalidad es indiscutible, pero su legitimidad es más que dudosa ... suponiendo una evidente quiebra de los principios y valores democráticos".
En la moción, el PP exigía al Consejo de Gobierno de la Junta de Andalucía "el inmediato cumplimiento de cuantos compromisos tiene contraídos con la ciudad de Lucena, procediendo al abono de las aportaciones, participaciones y/o subvenciones que están formalmente convenidas y concedidas", así como la inmediata ejecución de cuantos proyectos tiene comprometidos con la ciudad o de aquellos cuya participación o aportación sea decisiva o necesaria. Asimismo se reclama del Gobierno de la Junta de Andalucía contestación y respuesta expresa a la petición formulada, en plazo de un mes desde su recepción y se pide que se constituya una comisión de seguimiento de los acuerdos, integrada por representantes de todos los grupos políticos de la Corporación Municipal.
Entre las actuaciones reclamadas se enumeran cuestiones como el pago de las subvenciones concedidas para la obras del casco histórico, la primera fase del estadio municipal y el auditorio municipal y el centro de energías renovables; las rentas adeudadas por el SAE por la utilización del complejo educativo de Los Santos, la resolución del expediente de expropiación de los terrenos usados por la administración autonómica para la autovía del Olivar, o la puesta en marcha o reinicio de proyectos de obras como el puente de Cabra, la licitación de la parte sanitaria del Centro Social-Sanitario, el desdoblamiento de los accesos desde la carretera de Cabra o el Plan del Río.
Desde el PSOE, Manuel Lara calificaba esa exposición de motivos como "argumento a medio camino entre el panfleto político, la provocación y el insulto", indicando que "en democracia gana las elecciones quien gobierna". Por su parte, el portavoz de IUCA, Miguel Villa, comenzó su intervención indicando que "si bien podemos estar de acuerdo con el fondo, no podemos hacerlo con preámbulo". Villa acusó al PP de "insultar a PSOE e IUCA y faltar el respeto y mofarse del presidente de su comunidad autónoma" y acusó a los populares de "seguir frustrados por no gobernar" y de preferir "un minuto de gloria" a "dedicar unos minutos a hacer algo por Lucena".
José María Morillo-Velarde, encargado de defender la moción del PP, acusó al equipo de gobierno, de "no entrar sobre el fondo de la moción, la petición a la Junta del cumplimiento de unos compromisos que están estrangulando a Lucena", algo que rechazaron tanto el PSOE como IUCA, indicando Miguel Villa que "cuando usted lo disponga acordaremos una moción conjunta con el cien por cien de las peticiones de la moción, pero sin ese preámbulo". En similares términos se expresó el alcalde, Juan Pérez que aprestó a Morillo-Velarde a pactar el contenido de una nueva moción con idénticas peticiones "mañana o cuando quiera".
El PP aceptó que se retirara de la moción parte de la misma, pero tanto PSOE como IUCA se negaron a aprobarla y emplazaron a una nueva redacción de la misma, respetando la totalidad de las peticiones formuladas a la Junta de Andalucía. Según Juan Pérez, alcalde de la ciudad, "al equipo de gobierno le preocupa Lucena igual que al PP".
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