La sección sindical de CSIF en el ayuntamiento de Lucena –que representa a la mayor parte de la plantilla de la Policía Local– está dispuesta a llegar a los tribunales si el consistorio lucentino no adopta la decisión de hacer frente al pago de los domingos y festivos, de acuerdo con el Acuerdo Marco vigente para los trabajadores municipales desde 2006.
El secretario general del sindicato, José Antonio Capote, ha señalado a LucenaHoy que "vamos a denunciar el cuadrante de trabajo y estamos dispuestos a no trabajar los festivos si no se pagan, como viene ocurriendo desde 2006". Ante la posibilidad de que puedan ser obligados a prestar esos servicios por un Decreto de Alcaldía, Capote asegura que "si nos obligan recurriremos a la vía contencioso-administrativa y será un juez quien dictamine".
Según Capote, el cobro de este complemento por trabajar en festivos es solo una de las reivindicaciones que el equipo de gobierno viene retrasando sine die. A esta se suman otras como el incremento del complemento específico de peligrosidad y penosidad, inherente al trabajo de cualquier policía y que, según Capote, "apenas llega a 30 euros al mes, 1,70 euros al día, poco más que lo que cobra por el mismo concepto un administrativo".
El sindicato asegura que "el malestar en la plantilla es generalizado", más aún teniendo en cuenta que "hemos perdido un diez por ciento de sus efectivos en los últimos años, tras producirse en torno a 14 o 15 jubilaciones y numerosos traslados de agentes a otros municipios que ofrecen mejores condiciones laborales y salariales y haber tenido como único refuerzo el de cuatro agentes, de los que uno ya se ha marchado". Según CSIF, todo ello ha dado lugar a situaciones como "la necesidad de reforzar los turnos, no para mejorar la seguridad con más efectivos como se deja ver desde el equipo de gobierno ante la ciudadanía, sino para cubrir los mínimos establecidos". Según el sindicato, "hoy hay en la calle menos policía local que hace diez años".
José Antonio Capote señala que "los policías locales nos sentimos discriminados con respecto al resto de trabajadores municipales, no se nos reconoce la flexibilidad para conciliar la vida laboral y familiar o acceso al teletrabajo por las características específicas de nuestros puestos, pero tampoco se valoran esas especificidades".
Según el agente y líder sindical, "es falso que el alcalde no esté al tanto de estas circunstancias que contribuyen a desmotivar a la plantilla, ya que el concejal de Seguridad Ciudadana, José Pedro Moreno, con el que existe una buena relación, se sentó con nosotros y nos solicitó una propuesta de remuneraciones que tiene sobre la mesa desde hace dos meses, sin que se haya producido ninguna respuesta o negociación sobre la misma".
Además, añade que "en estos últimos años el propio alcalde ha impulsado dos valoraciones de puestos de trabajo, con el consiguiente coste económico y de personal, pero ninguna se ha culminado y seguimos igual, por lo que esa injusticia sigue sin ser subsanada y el alcalde es conocedor de ello".
