Los restos óseos de la Cueva del Ángel vuelven a Lucena por deficiencias en el inventario y el procedimiento de entrega

Cultura asegura que en el inventario presentado figuraba un mayor número de cajas que el que se pretendía entregar y no se comunicaron previamente las condiciones de conservación de los restos.

24 de Enero de 2022
 Parte de las cajas de plástico que contienen los restos de la Cueva del Ángel enviados a Córdoba
Parte de las cajas de plástico que contienen los restos de la Cueva del Ángel enviados a Córdoba

Las 5.750 piezas de material óseo humano remitidas el pasado viernes al Museo Arqueológico Provincial por el equipo de investigación de la Cueva del Ángel realizaron un viaje de ida y vuelta, tras negarse a su recepción los responsables de la entidad.

La delegada territorial, Cristina Casanueva, ha señalado a este periódico que el Museo Arqueológico de Córdoba es "una institución seria" y la entrega de restos de excavaciones arqueológicas para su verificación "cuenta con unos procedimientos reglados que deben cumplirse siempre", algo que, a su juicio, no ocurrió el pasado viernes, por lo que se tomó nota de la comparecencia del equipo de investigación pero se optó por no recepcionar la colección.

Y es que, según Casanueva, "cuando los restos que se entregan precisan unas condiciones especiales de conservación –en este caso unas condiciones adecuadas de refrigeración para evitar la pérdida de material genético– debe comunicarse previamente al museo, para que se adopten las medidas necesarias", y esto –asegura la delegada– no ocurrió. 

Además, Casanueva ha indicado que "la documentación estaba incompleta, reflejando la memoria que se entregaban cosas que no formaban parte de la expedición".

En este sentido, María Dolores Baena, directora del Museo Arqueológico de Córdoba, señalaba que "los restos no fueron entregados por el director del proyecto, sino por una persona en su nombre y los inventarios venían mal, no correspondiéndose el número de cajas señalado en las actas –93– con el de cajas entregadas –47–". Según Baena "no podemos admitir un depósito sin saber lo que viene dentro".

 

NIEGA FALTA DE MEDIOS

Respecto a las críticas formuladas por la Fundación Instituto de Investigación de Prehistoria y Evolución Humana sobre una presunta falta de medios del museo provincial para preservar los restos de ADN histórico que contienen los huesos, María Dolores Baena ha señalado que "el Museo Arqueológico de Córdoba es una administración seria y responsable y un museo reconocido que se toma muy en serio su labor", indicando que "dispone de todos los requisitos y medios para la conservación", pero "lo lógico es que, previamente al traslado de los restos, se comuniquen al Museo los requisitos de conservación de los mismos para actuar en consecuencia, y en este caso no se ha hecho, limitándose el equipo de investigación a indicar dicha circunstancia en un documento que acompañaba las cajas en el momento de su entrega".

Por todo ello, el director del equipo de investigación deberá comunicar una nueva fecha de entrega con la antelación suficiente para prever las necesidades de conservación del material que se traslade. 

Además, Cristina Casanueva ha desmentido rotundamente que haya existido "agravio comparativo" hacia la excavación de la Cueva del Ángel respecto a otras actuaciones o municipios, como apuntaron el viernes desde la Fundación, indicando que "el trámite es igual para todos y tras la presentación de los restos y su verificación, los museos locales pueden solicitar la devolución de los mismos para su exposición, como ha hecho el ayuntamiento de Cabra con los restos del yacimiento neolítico de La Beleña". De hecho Casanueva ha dejado abierta la posibilidad de que el Ayuntamiento de Lucena pueda pedir la conservación de los restos óseos de la Cueva del Ángel en el Museo Arqueológico de Lucena, evitando su traslado, no así en una entidad privada como la fundación.

 

NUEVA MEMORIA

Respecto a la exigencia de la redacción de una nueva memoria de la última campaña de excavaciones como paso previo a la puesta en marcha de un nuevo proyecto de investigación, tras rechazar la inicialmente presentada por Cecilio Barroso, la delegada territorial indicó que "el trabajo presentado no se ha rechazado por políticos sino por técnicos cualificados y relevantes, integrados en una comisión autonómica de arqueología" por lo que su decisión es concluyente.

Cristina Casanueva no ha querido entrar en la decisión que adopte el ayuntamiento de Lucena, como entidad promotora de una nueva campaña de investigación, sobre el equipo encargado de llevarla a cabo: "No tenemos nada que decir, es la institución que va a desarrollar la actuación la que debe decidir", afirmó la delegada.

Sea como fuere, lo cierto es que cuanto toca a este yacimiento se convierte en un problema, dañando la imagen de este templo del Paleolítico Medio, considerado por todos como uno de los yacimientos más importantes del mundo en su género, y retrasando nuevas actuaciones en el mismo.  Así ha ocurrido con el cierre del proyecto ejecutado entre los años 2013-2019, pero también con la inversión de casi 400.000 euros anunciada hace años por parte de la Consejería de Medio Ambiente para la mejora de accesos y apertura a los visitantes de la sima o con la renovación de la cubierta de la zona arqueológica de La Covacha, cuyas obras fueron adjudicadas por el Ayuntamiento para desistir después de la ejecución para retocar el proyecto debido a la existencia de una colonia de murciélagos en el interior. 

Archivado en
Suscríbete a nuestra newsletter
Ahora también te mantenemos informado a través de nuestra newsletter diaria. Si deseas recibirla en tu correo electrónico solo tienes que registrarte como usuario completando tus datos en este enlace. Es un servicio totalmente gratuito de LucenaHoy.