Desde que arrancó este año 2023, el precio del oro ha aumentado en más de un 5%, pues ya el pasado jueves alcanzó un valor de 1948 dólares por onza. Es un alza que ha venido en tendencia, desde los últimos meses del año anterior, cuando a finales de octubre alcanzó los 1630 dólares y comenzó a recuperar su valor en el mercado, que venía con ciertas fluctuaciones desde marzo de 2022. Invertir en oro, en estos momentos, puede resultar una buena forma de mantener una cobertura, frente a los índices crecientes de inflación. Como inversión, el valor del oro demuestra una menor volatilidad y siempre se le ha considerado por los expertos, como un “refugio seguro”.
Esto se debe a que, el valor de este metal precioso tiende a registrar un alza muy significativa en su valor, precisamente cuando la mayoría de las economías mundiales están en crisis o existen periodos importantes de turbulencia política entre países. Muchos inversores aseguran que Trade Republic es fiable, si está buscando una forma sencilla de invertir en este mercado financiero.
Tensiones geopolíticas
Diversos factores, sobre todo situaciones de tensión a nivel político en el mundo, están entre las principales causas que han provocado este auge en el valor de este metal precioso, al menos durante varios días consecutivos. Desde mediados de marzo de 2022 y ante la incertidumbre que se generó debido a la invasión de Rusia a Ucrania, se propició un alza en el precio del oro, llegando a alcanzar un máximo en su valor de 2046.70 dólares por cada onza.
Generalmente, cuando existe un escenario de guerra o conflictos geopolíticos a nivel internacional, los inversores buscan cobertura en activos de refugio. En este caso, se sienten empujados a invertir en oro, dado que aumenta el miedo o el nerviosismo entre los inversionistas.
En tiempos de crisis mundiales, los precios de los activos de riesgo caen (monedas emergentes, acciones, bonos, etc.) y el valor de los activos seguros, como el oro o la plata, suben. Esto se debe a que el oro es un activo tangible, físico, que no puede ser destruido, a diferencia de los demás activos financieros existentes.
Otro ejemplo que puede ilustrar muy bien este escenario, fue la visita en marzo de 2022 de Nancy Pelosi, presidenta de la Cámara de Representantes de EEUU, a Taiwán; todo esto, en un momento bastante tormentoso, entre las relaciones de Estados Unidos con China. El precio del metal dorado se vio beneficiado por este momento de tensión política y registró, para la fecha, un alza del 0.1% en su valor, ubicándose en 1761.33% dólares.
Elevadas reservas mundiales
Para los expertos de brokerschart.es todo este auge en el valor del oro por onza, ha hecho que las inversiones se fortalezcan y, por tanto, haya una demanda importante por parte de los bancos centrales más importantes, para aumentar sus reservas en este metal precioso. De acuerdo a un informe publicado por el Consejo Mundial del Oro, a finales del último trimestre de 2022, se habían agregado alrededor de 637 toneladas de oro a las reservas.
Este mismo informe indica que, el total de reservas en poder de los bancos centrales, está por encima de las 36 mil toneladas de oro. Estas grandes reservas de oro se sostienen, en la mayoría de los gobiernos, con la intención de poseer un ahorro que les pueda servir como garantía de depósito o, en caso de pasar por una crisis económica, tienen la posibilidad de venderlo y así obtener mayor liquidez.
De acuerdo con cifras aportadas por el Fondo Monetario Internacional (FMI), de las más de 36 mil toneladas de oro presentes en las distintas arcas de los bancos centrales a nivel mundial, en solo cinco países está concentrado el 54%. Entonces, entre los países con más reservas de oro en todo el mundo se pueden contar:
- Estados Unidos tiene 8.133 toneladas de oro.
- Alemania posee 3.366 toneladas.
- El Fondo Monetario Internacional cuenta con 2.814 toneladas.
- Italia ostenta 2.451 toneladas de oro.
- Francia tiene 2.436 toneladas.
- Rusia cuenta con 2.271 toneladas.
En el caso de España, este ocupa el puesto número 19 de esta lista, con 283 toneladas de reservas de oro. Una cantidad bastante modesta, para ser la cuarta economía de Europa; sin embargo, esto no siempre ha sido así. A lo largo de la historia, España ha venido vendiendo sus reservas en este material precioso, cada vez que atraviesa una crisis importante, como por ejemplo la Guerra Civil de 1936 y la llamada “Crisis de las hipotecas subprime” que alcanzó al país en 2007.
