Si necesitas imprimir muchos documentos, es probable que te estés planteando la posibilidad de comprar una impresora nueva, y si ya has revisado los precios, te habrás dado cuenta de que es una inversión considerable.

Invertir tanto en una impresora nueva no siempre da los mejores resultados porque tienes que pagar mucho más de lo que tu presupuesto te permite. Pero tranquilo, porque hay opciones, como el renting impresoras fotocopiadoras que es una opción más viable.

Si apuestas por el renting de impresoras, la inversión inicial será considerablemente menor, pero los beneficios serán mayores. Y como se trata de un tema que estamos seguros que te interesa conocer a fondo, hoy te lo contamos absolutamente todo.

¿Qué es el renting de impresoras?

El renting de impresoras es un modelo de alquiler de equipos de impresión o fotocopiado que es accesible para muchas más personas, a diferencia de la compra de impresoras nuevas que es casi exclusiva para quienes tienen un presupuesto muy amplio.

En este caso, el renting funciona de forma sencilla. Tú escoges la impresora que quieres basado en tus necesidades. Por ejemplo, puedes escoger entre impresoras a color, el renting de impresoras en blanco y negro, fotocopiadoras, o alquilar impresoras multifuncionales.

Además, tienes la opción de elegir la marca que deseas, el tiempo de contrato y más. Al final, recibes la impresora, y solo tendrás que pagar el alquiler mensual por usarla. Eso te hará gastar menos, pero tener el equipo en tu oficina o casa el tiempo que desees.

¿Cuáles marcas de impresoras se pueden rentar?

Aunque no lo parezca, el renting de impresoras es un mercado bastante amplio, así que puedes encontrar impresoras de todas las marcas y modelos que te puedas imaginar.

Por ejemplo, hay impresoras multifunción en renting de marcas muy reconocidas que puedes alquilar por un precio bastante bajo, así que te llevarás un producto de calidad por poco.

En cuanto a las marcas, aunque la disponibilidad es variable, algunas de las que puedes conseguir son:

• Toshiba
• Xerox
• Sharp
• Epson
• Ricoh
• Samsung
• Canon
• Konica Minolta
• Develop
• Brother
• Kyocera
• Lexmark

Las anteriores son solo algunas de las alternativas de impresoras por renting que puedes encontrar. Además, como son buenas marcas, estarás seguro de que su funcionamiento será óptimo durante todo el contrato.

¿Cuánto cuesta alquilar una impresora?

El precio del renting de equipos de impresión varía en función de múltiples factores, como la marca, el tipo de impresora y la capacidad que tenga.

Por ejemplo, una impresora blanco y negro, monofuncional y apta para un volumen bajo de impresión será más barato que una impresora multifuncional a color y que está diseñada para imprimir un volumen elevado de documentos al día.

Lo anterior significa que el precio es bastante variable, pero hay alternativas que van desde los 9,95 euros al mes. En esta categoría puedes encontrar productos con muy buena calidad, así que no tienes que pagar demasiado.

Las principales ventajas del renting de impresoras

Es imposible no comparar el sistema de renta de impresoras con el tradicional método de comprar una impresora nueva.

En ocasiones puede parecer que lo mejor es comprar la impresora nueva, pero la experiencia nos dice que el renting ofrece mayores beneficios.

Y en caso de que no sepas cuáles son, te dejamos un listado de algunas de las ventajas que obtendrás con el renting.

Máximo ahorro

Si quieres ahorrar, entonces el renting es la opción ideal para ti, porque es una alternativa mucho más barata que comprar una impresora nueva.

¿Ya has revisado el precio de las impresoras nuevas? Si es así, te habrás dado cuenta de que la inversión no es baja. Además, si la compras, el dispositivo se hará viejo, y cada día perderá valor, así que tirarás el dinero a la basura.

En cambio, si eliges el renting, solo tendrás que pagar una fracción del precio mes a mes. Eso te ayudará a usar tu presupuesto de forma inteligente y a evitar gastar de más.

Olvídate de los mantenimientos y servicios técnicos

Si compras una impresora, tú tendrás que encargarte del servicio técnico y del mantenimiento del aparato, pero si alquilas, la compañía hará todo ese trabajo por ti.

Así que cada vez que la impresora necesite mantenimiento, irá un técnico especializado a hacer el trabajo, y si necesita reparación, también se encargarán.

Eso elimina por completo los costes imprevistos relacionados con averías, así que no habrá variaciones en tu presupuesto.

Equipos de última generación

La tecnología avanza a pasos agigantados, y mantenerse actualizado es fundamental. Así que lo ideal no es comprar una impresora y que se quede allí y que en 2 años tengas que comprar una nueva.

Lo mejor en estos casos es apostar por el renting, pues cuando te hayas aburrido de la impresora y quieras una nueva y más novedosa, puedes obtenerla porque los contratos son flexibles y se adaptan a tus necesidades.

Sin precios cambiantes

Cuando rentas una impresora, tienes que pagar la mensualidad del alquiler. Lo positivo es que el alquiler es estático y no cambiante.

Al pagar la mensualidad, allí se incluyen los gastos y también el uso del aparato. Entonces, mes a mes pagarás la misma cantidad sin cuotas sorpresa.

¿Quién debería usar el renting de impresoras?

En principio puede parecer que el renting solo es una opción para algunos, pero en realidad el público al que apunta es más que amplio.

Como existen múltiples tipos de impresoras para alquilar, cualquier persona puede alquilar una.

Por ejemplo, si tienes una empresa pequeña o mediana, el renting es ideal porque te servirá para imprimir facturas, contratos, documentos y cualquier otro material que la compañía necesite en el día a día.

Si tienes una empresa grande, también es buena opción el renting porque existen impresoras aptas para un gran volumen de impresión en diferentes formatos, y eso hará que el coste de las impresiones se minimice.

Pero espera, porque si eres un autónomo, trabajas desde casa, y necesitas una impresora, también puedes alquilar una. En estos casos, puede rentar una más pequeña, pero de muy buena calidad que cubra una demanda baja o moderada por un precio mínimo.