"Rajoy: Dicho y no dicho", por Alfonso Jiménez

Alfonso Jiménez
Escritor
29 de Diciembre de 2015
Qué mal me cae Rajoy. Creo que es el Presidente del Gobierno con peor concepto sobre los españoles. Da la impresión de que nos cree que medio tontos, fácilmente engañables y por eso cuando habla dice lo que quiere pensando que nos tragamos la bola.
 
El viernes pasado se dignó, por segunda vez en el año, dar una explicación en rueda de prensa. No hubo plasma esta vez, sino presencia física. Seguro de su valía y de nuestra inferioridad, apareció braceando a media altura como si fuera a un desfile y, acercándose al atril, fue leyendo un resumen de los últimos éxitos de su gestión como Presidente.
 
Es mucha la cara que le echa al asunto. Un periodista le hizo tres preguntas en 30 segundos: si se iba a presentar como candidato a Presidente para las próximas Generales; si se consideraba culpable de haber nombrado ministra a Ana Mato; si apoyaría a Esperanza Aguirre para alcaldesa de Madrid.
 
Rajoy, el registrador, le respondió en 3 segundos: "A la primera, Sí; A la segunda: Ya lo expliqué; a la tercera: Es pronto y se verá". Me parece increíble que en ese momento, no le plantaran los periodistas. Luego, Rajoy prosiguió más o menos así:
 
"En el 2013 les dije que al final de 2014 en España habría menos gente en la lista del paro que en 2013, y así ha sido: España tiene menos parados y los objetivos previstos los hemos superado con creces. Por eso, las pensiones vamos a subirlas un 0,25% y el salario mínimo un 0,5%, lo que significa unas subidas modestas." Obsérvese cómo con su manera de hablar, Rajoy nos cree idiotas sin remedio. En efecto: Hay menos gente en la lista del paro porque muchos ya han dejado de apuntarse o se han ido del país. Por otra parte, al hablar en tantos por ciento, no aclara lo que esas subidas significan. Por ejemplo:
 
- La pensión mínima de viudedad ha subido 1,5 euros al mes, es decir, 5 céntimos diarios.
- El salario mínimo interprofesional ha subido 3,3 euros al mes, esto es, 10 céntimos diarios.
 
¿Son estos datos motivos para brindar por el maravilloso año nuevo que se nos presenta¿ ¿No son más bien otra congelación real manipulada con números ínfimos para enredar al personal? Hasta aquí algo de lo que dijo para animar al descorche. Ahora vamos a citar algo de lo que se nos avecina, pero que silenció en su discurso:
 
1.- Ahora se van a rescatar las autopistas en quiebra con el dinero de todos -como se hizo con las Cajas- sin posibilidad de recuperar los miles de millones que se invertirán en sanearlas.
2.- Más de 70.000 locales comerciales tradicionales van a echar el cierre y despedir personal, por causa de que el Gobierno ha aprobado el fin de la renta antigua para estos negocios tradicionales.
3.- La luz no bajará un 4%, como dice el ministro Soria, sino que según cálculos de Facua, subirá un 12%, con lo que las clases menos pudientes sufrirán gran acoso económico.
4.- Tratar de evitar desahucios o participar en manifestaciones no autorizadas serán penalizadas con multas de 600 a 30.000 euros, que es lo que se ha aprobado con la "ley mordaza". Y así sucesivamente.
 
¿Hay motivos para confiar en esa recuperación que se nos anuncia a bombo y platillo? Pues no. Ojalá me equivoque. Ojalá.
 
Más artículos de Alfonso Jiménez en su blog: La Carpintería
 
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