El Ayuntamiento de Lucena ha decidido finalmente resolver el contrato adjudicado a Elecnor Servicios y Proyectos para el soterramiento de la línea de alta tensión que sobrevuela los terrenos del futuro centro sanitario de la ciudad. La decisión supone de facto la necesidad de proceder a una nueva licitación del proyecto, que será ya la tercera. Así lo ha confirmado el concejal de Obras, Javier Pineda, a preguntas de este periódico, tras valorar el informe desfavorable emitido por los servicios jurídicos municipales ante la última propuesta de la empresa adjudicataria.
Esta decisión pone fin a un proceso que acumula ya años de retrasos, problemas jurídicos con las servidumbres de paso de la línea, modificaciones técnicas y conflictos económicos. En este punto, en la última sesión plenaria se propuso por parte del grupo municipal de IU la convocatoria de una Junta de Portavoces para analizar de forma conjunta la situación. Atendida la petición, dicha reunión se celebró la semana pasada, y según explicó Pineda, “viendo el informe de los servicios jurídicos, resulta absurdo seguir avanzando por una vía que no ofrece salida. Es preferible resolver el contrato y volver a sacarlo conforme a los criterios legales marcados por los técnicos”.
La adjudicación del contrato que ahora será rescindido fue formalizada en enero de 2023 por un importe de 694.907 euros. En octubre de 2024, tras una modificación del trazado de la línea, el presupuesto se elevo a 772.845 euros. Hoy Pineda ha dado por hecho que la nueva licitación será superior, ya que incorporará el incremento sufrido por los materiales en este periodo, atendiendo al informe elaborado por la dirección de obra, encomendada a SATEL, lo que, paradójicamente, puede suponer que finalmente el coste de las obras sea similar al que ahora no ha podido ser aceptado motivando una nueva dilación del proyecto.
Un proyecto clave que no logra arrancar
El soterramiento de la línea eléctrica de 132 kV “Baena – Iznájar” es una condición imprescindible para el desarrollo del nuevo hospital de alta resolución o centro sanitario –como es sabido la Junta de Andalucía aún no ha presentado el nuevo plan funcional del centro–, y responde al protocolo firmado entre el Ayuntamiento y el Servicio Andaluz de Salud (SAS) en 2019 para el desarrollo de esta infraestructura. El proyecto contempla enterrar 215 metros de cableado entre la urbanización El Cahiz y la carretera CV-218, liberando así el suelo necesario para el futuro centro sanitario. La intervención cuenta con un plazo de ejecución previsto en cuatro meses.
A pesar de su carácter estratégico, el proyecto ha estado marcado por la inestabilidad desde sus inicios. Aprobado técnicamente en 2021, ya ha pasado por dos licitaciones fallidas. Con Elecnor, que firmó el acta de replanteo en diciembre de 2023, las obras nunca comenzaron. Primero, por desavenencias técnicas con Endesa, propietaria de la línea, que obligaron a rehacer el trazado y documentación. Y después, por la petición de Elecnor de incrementar el presupuesto de adjudicación en 70.000 euros por el encarecimiento de los materiales, controversia que ha terminado de bloquear la actuación.
Ahora, el Ayuntamiento vuelve al punto de partida, con la esperanza de que la nueva licitación desbloquee un proyecto indispensable para la salud pública local. “Nuestro alcalde ha marcado este expediente como una prioridad absoluta”, afirmaba hoy el concejal, dejando entrever que todos los departamentos implicados trabajarán para que el nuevo concurso se active cuanto antes.