"Indignación" es la palabra que mejor define el sentimiento de los vecinos de las calles Zagrilla, Carcabuey y Montilla que desde la finalización de las obras realizadas por el Ayuntamiento en esta zona de la ciudad en los últimos meses vienen padeciendo inundaciones en los aparcamientos y sótanos de sus viviendas debido a lo que que consideran un deficiente diseño de esta actuación.
A simple vista llama la atención la elevación de la confluencia de la calles Zagrilla y Carcabuey sobre el nivel del resto de la calle. Los vecinos señalan que este elemento impide el flujo normal del agua, que queda remansada en ambas calles formando auténticas piscinas. A ello contribuye la escasa dimensión de los imbornales, que quedan fácilmente obstruidos por las hojas o plásticos arrastrados por el agua. El resultado de todo ello, además del embalsamiento del agua, es la entrada de la misma en los soportales y el aparcamiento de uno de los edificios de viviendas, que ha llegado a inundarse con motivo de los últimos episodios de lluvias, especialmente tras la tormenta del 21 de septiembre. Una situación similar se ha producido en numerosas viviendas de estas dos calles y de la vecina calle Montilla, como lo demuestran los numerosos vídeos y fotografías aportadas por el vecindario.
Una imagen de las balsas de agua en la calle Zagrilla el pasado lunes y el día 21 de septiembre
A ello se suma según Fernando Hidalgo, portavoz de los vecinos, la filtración de agua de lluvia en el citado aparcamiento desde la remozada calle Zagrilla, como previsible consecuencia de una mala ejecución de la misma, o los problemas derivados de la acumulación de agua en las instalaciones del antiguo campo de fútbol municipal, actualmente propiedad de una promotora inmobiliaria, que ha provocado filtraciones y daños en varias viviendas de la zona baja de la calle Montilla.
Otra situación anómala revelada con motivo de las últimas lluvias es el afloramiento de restos de productos aparentemente vinculados a alguna de las empresas alimentarias existentes en la zona, mezclados con el agua estancada, presumiblemente debido al colapso puntual de alguno de los colectores de saneamiento.
Entrada de agua en una de las cocheras de la calle Zagrilla en dos imágenes
Según señalan los afectados, estas situaciones han sido puestas en conocimiento del área de Obras y Servicios Operativos del Ayuntamiento de Lucena a través del representante legal de la comunidad de vecinos sin que por el momento se haya producido ninguna respuesta municipal por los problemas generados por estas obras, finalizadas hace escasamente dos meses.
"Nunca antes, en 25 años, habíamos tenido ningún problema, el agua discurría calle abajo sin ocasionar ningún daño, pero ahora se queda aquí, sin que podamos hacer nada", señala una de las vecinas, mientras otra apunta a una "clara negligencia del servicio de obras o los técnicos que han diseñado la remodelación".
Así, los vecinos exigen al ayuntamiento que se estudie su situación y se modifique la actuación realizada, ya sea eliminando estas "barreras" artificiales o ampliando los imbornales de forma que se garantice la evacuación del agua. Además, solicitan que se estudie la red de saneamiento mediante cámaras para detectar posibles obstrucciones en la misma.
Sótano inundado de una de las viviendas de la calle Carcabuey
