Ante numerosos familiares, amigos, autoridades y vecinos, esta mañana se ha celebrado el emotivo acto de descubrimiento de la placa que da nombre desde hoy a los "Jardines del escritor Miguel Molina Rabasco", situados junto a la Ronda del Valle, muy cerca de la Plaza de Mariana Pineda.
Con una emotiva ceremonia, el Ayuntamiento de Lucena ha rendido homenaje al escritor y funcionario municipal Miguel Molina, descubriendo la placa que da nombre desde ahora a los jardines ubicados junto a la Ronda del Valle, entre las calles Abderramán, Generalife y Alcazaba.
Ante numerosos familiares, amigos y autoridades, la edil de Urbanismo, Charo Valverde, abrió el evento con la lectura del acta plenaria en la que, por unanimidad, se aprobó la nominación de este espacio. Seguidamente, ofreció una semblanza del homenajeado, repasando su trayectoria profesional y literaria. “Don Miguel Molina Rabasco fue un escritor poliédrico, con más de 300 obras que abarcan desde el ensayo al teatro, pasando por la poesía y el periodismo”, destacó Valverde, insistiendo en el carácter "riguroso, formado y profundamente comprometido con la vida cultural de nuestra ciudad" del homenajeado.
Un trabajo que comenzó hace cinco años
Posteriormente, tomó la palabra su hijo, Alberto Molina, quien visiblemente emocionado compartió el origen de este homenaje: un compromiso personal asumido tras la muerte de su padre, que desembocó en la creación de una plataforma digital donde se recogen más de 340 obras del autor.
“Para mí, esto es la guinda final a un trabajo que comenzó hace cinco años”, confesó. “Mi padre era un hombre discreto, y este rincón apartado y verde, junto a la iglesia del Valle, encaja perfectamente con su personalidad. Estoy seguro de que a él y a mi madre les habría encantado.”
Alberto Molina agradeció a todas las personas e instituciones implicadas en el proceso, especialmente al profesor Antonio Cruz Casado, quien propuso formalmente la nominación del jardín durante la presentación de la plataforma digital, así como a los cronistas y técnicos municipales que facilitaron la tramitación del expediente.
Un reconocimiento merecido
El acto fue cerrado por el alcalde de Lucena, Aurelio Fernández, quien subrayó la relevancia de este reconocimiento, incluyendo a Molina Rabasco en esa generación brillante de escritores lucentinos, nacidos en los años 20 y 30 del pasado siglo, de la que también forman parte José García Aznar, Antonio Gómez Pulín, Antonio Santos Padilla, Francisco Espada Gómez, África Pedraza Molina o Antonio Manjón Cabeza, cuyos nombres ya están en nuestro callejero.
“Hoy Lucena honra a uno de los suyos. Al dar nombre a este jardín, reconocemos la vida y la obra de Miguel Molina, un hombre que engrandeció nuestra cultura, que participó activamente en la vida social y festiva de nuestra tierra y que dejó páginas que forman parte de nuestra memoria colectiva”, afirmó el regidor. “A partir de hoy, cada persona que pase por aquí leerá su nombre.
El regidor lucentino señaló que, a través de estos jardines, Miguel Molina seguirá inspirando a quienes creen en la palabra escrita como forma de entender la vida”, para concluir expresando su deseo de que este lugar "sea un recordatorio de lo que representa la cultura cuando nace desde lo local, de lo que significa escribir desde el amor a una ciudad y de cómo el talento, la constancia y el compromiso pueden convertir una vida en un legado".
