El Sindicato Médico Andaluz (SMA) de Córdoba ha convocado para este miércoles una concentración de repulsa frente al Centro de Salud Lucena II tras "la agresión sufrida hace unas semanas por un médico especialista en Psiquiatría durante la atención a un paciente".
El acto, que también ha contado con la presencia de UGT, CC.OO. y SATSE, tiene como objetivo "visibilizar no solo la condena absoluta a cualquier forma de violencia contra los profesionales sanitarios, sino también un aspecto clave: la responsabilidad reforzada de la Administración en la prevención de riesgos laborales en este tipo de centros".
El SMA recuerda que en este centro sanitario se atiende de forma habitual a pacientes con patologías psiquiátricas, algunos de ellos con "conductas potencialmente desorganizadas o agresivas". Pese a ello, denuncian que "las medidas de protección y prevención con las que cuentan los profesionales son claramente insuficientes para un riesgo que es conocido, evidente y, por tanto, prevenible".
Para la organización sindical, este episodio "no debe verse como un incidente aislado, sino como un reflejo de un déficit estructural en los mecanismos de prevención de riesgos laborales", especialmente en centros que atienden a pacientes con patologías psiquiátricas, donde "el riesgo de agresión es mayor y más complejo". Por ello, insisten en la necesidad de "reforzar urgentemente recursos, personal y medidas de seguridad" y adaptar protocolos y circuitos asistenciales a las necesidades reales del servicio.
“Basta de normalizar la inseguridad”
Durante la concentración, la secretaria general del Sindicato Médico, Inmaculada Romero, ha recordado que "una vez más un profesional sanitario ha sido agredido", en esta ocasión un psiquiatra del propio centro. Ha expresado el apoyo del sindicato al profesional afectado y a todo el equipo de Lucena II, subrayando que "nadie que dedica su vida a cuidar de los demás debería volver a su casa con miedo o la sensación de haber estado en peligro".
La representante del SMA ha denunciado un fallo en las medidas de prevención de riesgos laborales y ha advertido de que "no basta con pedir calma o profesionalidad al médico cuando el entorno no le ofrece seguridad, ni con enviar protocolos si no van acompañados de medios, personal y protección real".
Por ello, ha exigido una evaluación urgente de los riesgos laborales en centros que atienden a pacientes psiquiátricos, el refuerzo de las medidas de seguridad y la adecuación de los espacios y circuitos asistenciales. "La protección de los profesionales es una responsabilidad irrenunciable", ha afirmado.
Romero ha concluido reclamando "tolerancia cero, prevención real y ni una agresión más", advirtiendo de que cuando el riesgo era evidente, "la inacción deja de ser un error y pasa a ser una negligencia".