Se trata de una medida provisional hasta que la aseguradora de orden de iniciar una reparación para la que ya están preparados los distintos profesionales que deben participar en la misma.
Los vecinos han sufrido más de un año y medio de problemas derivados del progresivo hundimiento de la calzada como consecuencia de la rotura de una tubería y las características del material de relleno del subsuelo.